Hola de nuevo!
¿No es curioso?, terminó el Mundial, pero el Fútbol sigue, y seguirá durante todo el año. Es una gran constante en estos tiempos modernos donde prácticamente se puede tener acceso a todas las ligas importantes del mundo, incluyendo la Liga MX.
Y por esta razón, en esta ocasión no hablaré de Fútbol, hoy hablaré de un deporte que para muchos es desconocido pero para otras personas, es su pasión y va más allá del deporte mismo.
Actualmente se están disputando los XXIII Juegos Centroamericanos y del Caribe en Barranquilla, Colombia. Sitio famoso por ser el lugar donde Shakira creció y de donde sorprendió al mundo exportando su música. En estos juegos, México siempre ha tenido un papel primordial, inclusive gran parte de su organización y desarrollo se debe a nuestro país.
Los primeros juegos fueron organizados por la Sociedad Olímpica Mexicana en 1926 y tuvieron como primer sede nuestro país. La historia detrás de esta organización se debió a la pobre participación que tuvo nuestro país en las Olimpiadas de Paris en 1924 y la intención de incentivar a otros países de la región cercana al Caribe a aumentar sus niveles de competencia en diferentes disciplinas.
Al final, las razones sobraron y hoy en día han sido un evento muy importante en la vida de atletas mexicanos que muchas veces toman de referencia esta competición para después enfrentar otro tipo de justas como Juegos Panamericanos, Campeonatos Mundiales y las gloriosas y soñadas Olimpiadas.
Actualmente México lidera el medallero con 188 medallas, de las cuales 76 son de Oro.
Dentro de estas medallas de oro, una disciplina ha cosechado 3 medallas. El Squash.
La delegación Mexicana de Squash en Barranquilla
El Squash para mi fue un deporte que descubrí primero al encontrar una vieja raqueta de madera en el clóset de mi papá y que me llamó la atención por su forma. Al principio pensaba que era una raqueta para jugar Tenis, pero al preguntarle a mi papá supe que era para jugar Squash. ¿Squash? ¿qué es eso? Pues ese deporte desconocido para mi, volvió a encontrarse en mi camino cuando conocí a uno de mis mejores amigos. Miguel Lámbarri, fue quien me introdujo a este bello deporte. A pesar de que yo no tengo las mejores condiciones o técnica para jugar, fue lo suficientemente paciente para enseñarme sobre este deporte y por esto le agradeceré siempre.
Mi amigo Mike (negro) en acción en el histórico Squash Inn
Después me dí cuenta de que el Squash, tiene un gran común denominador, es un deporte disfrutado por las personas que después del trabajo quieren distraerse y eliminar el estrés. Así fue como descubrí que el Squash también tenía vida en las noches de media semana y podía ayudar inclusive a unir equipos de trabajo en un ambiente diferente.
Solo hay un aspecto negativo sobre este gran deporte, y realmente no tiene que ver con el deporte en sí. El Squash no ha podido entrar al programa Olímpico. ¿Cómo pueden explicar que un deporte que es televisado y seguido en 88 naciones con un potencial de llegar a 250 millones de hogares y que fue catalogado por la revista Forbes como el deporte más saludable del mundo, no sea Olímpico?
Gráfica de la revista Forbes sobre el análisis de los deportes más saludables.
La razón, corrupción y política. Desgraciadamente otro tipo de deportes han podido corromper a las altas esferas del Comité Olímpico Internacional y entrar a los programas olímpicos antes que este gran deporte.
Mi reflexión es la siguiente, inclusive en el deporte, estos episodios negativos de corrupción hacen que la gente que dedica sus esfuerzos en sobresalir en lo más alto del Olímpo deportivo, frustre sus sueños.
Si bien los Juegos Olímpicos es la máxima expresión de deporte, el significado de competición debe de ser un sentimiento interno, desarrollado por la necesidad de demostrar que eres mejor que tú mismo y no que los demás. Esa es la gran enseñanza del deporte, y a pesar de esta frustración, el Squash, no se ha dejado amedrentar y los squashistas del mundo siguen su camino demostrándose a si mismos que la competición es interna, y esa es la mejor de las batallas por ganar. No solo es el más saludable, posiblemente también sea el mejor para desarrollar la salud de tu mente.
Disfruten su fin.